CONSERVA DE TOMATE

Datos históricos indican que el tomate fue traído por Hernán Cortés en 1523, poco después de la conquista de México.
 Entró en Europa por Galicia aunque su extensión se produjo  en Italia, a través de las cocinas de Nápoles y de Génova, así como de la cocina francesa de Niza. Los italianos lo llamaron "poma de oro" y los franceses, "pomme d'amour".
La conserva del tomate ha sido tradicional a nivel familiar desde principios del siglo XX, pero en la década de los 70, experimentó un gran auge, que se ha mantenido hasta la actualidad. Son numerosas las formas de presentación del tomate en conserva: tomate natural pelado, tomate natural pelado y triturado, tomate frito, tomate concentrado, zumo de tomate, salsas de tomate, etc.
Recuerdo cuando ayudábamos, mi hermana y yo, a mi madre a hacer  conserva en el campo, a finales de Agosto. Compraba cajas de tomates maduros y los rallábamos para introducirlo en botellas grandes de cristal (las típicas de zumo). Luego en un bidón grande los ponían al baño María. 
Hoy, recordando esa época, he hecho conserva de tomate, pero mucho más fácil, gracias al Thermomix.

PREPARACIÓN:

Echar en el vaso 1 kg. de tomates a los que previamente habremos quitado la parte dura de arriba.

Triturar 10 seg. a velocidad 6-7. Verter en tarros de cristal esterilizados (los he hervido 15 minutos). Colocarlos en una olla grande con agua y hervir durante 30 minutos. 

Cuando acabe el tiempo dejarlos dentro de la olla hasta que se enfríen. Y ya tenemos tomate para guardar.