El mejillón es un marisco muy sabroso, capaz, por sí solo, de constituir un plato saludable.
Fueron los romanos los que comenzaron a consumirlos en gran escala, cultivándolos por el sencillo método de recogerlos en sus criaderos y llevarlos a otros emplazamientos para que allí pudieran reproducirse.
En España, el gallego Martínez Motiño, cocinero de Felipe II, los preparaba para este monarca, haciéndose gran consumo en su corte.
El preparar un plato de mejillones al vapor no tiene ningún misterio. Primeramente hay que limpiarlos bajo el grifo, rascar su concha y quitar los "hilillos" que tienen. Después se ponen en una olla al fuego hasta que se abran. Cuando empiezan a abrirse, les echo un chorrito de vino blanco y apago la olla. Dejo reposar un poco y seguidamente se presentan en el plato. Los que no se han abierto se tiran.
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